Hace un par de semanas les hablaba del clúster de rentas que, en mi opinión, se está creando en muchos ámbitos y dando lugar a disparidades retributivas que son alarmantes y generan una sociedad claramente fragmentada. Quizá alguien se sintió molesto por ello y ‘hackearon’, como se dice en argot informático, este blog, en concreto el artículo citado, con código irreverente.
Pues bien, el clúster de rentas ha llegado para quedarse y va a ser motivo de las más divergentes explicaciones y opiniones, fruto de la disonancia e ignorancia en la que estamos inmersos. Disculpen esta opinión transgresora, pero viendo lo que se dice últimamente no es posible resistirse, los empresarios suelen ser de tendencia conservadora en lo político, grupo que se resiste a aceptar la llegada de extranjeros, y sin embargo son los más beneficiados con ello por el abaratamiento de salarios que supone, ¿no ven en ello una gran contradicción?
Fíjense en el titular de un diario español que nos habla de lo que, al parecer, ha afirmado el nuevo Fiscal General de los EEUU,

Portada de elmundo.es del 10 de febrero de 2017
Hubo un tiempo en que a EEUU llegaban informáticos de otros países, atraídos por la necesidad de profesionales en ese campo y que, al cabo del tiempo, terminaban ganando lo que los nativos, no se reducía el salario interior. Hasta que las empresas se dieron cuenta de que era más rentable desarrollar fuera y así los salarios no aumentaban y el producto resultante salía más barato, lo que se ha dado en llamar la deslocalización u ‘offshoring’. Telefonica de España sabe mucho de esto con sus centros de atención al cliente localizados en el exterior y que han empezado a regresar, ahora que los salarios han caído en el país, no crean en demasía esas justificaciones de la vuelta por la calidad.
Estaba analizando estas cosas cuando de pronto surgió el asunto de los estibadores, sobre el que les dejo dos versiones distintas de dos medios de comunicación, con evidente distancia ideológica, aquí tienen una y otra, para que gracias a las mismas se hagan una idea más certera del estado de la cuestión. No entraré en defender o criticar las condiciones salariales de los estibadores ni la oportunidad de liberalizar un sector que es fundamental en un país que quiere mirar comercialmente al exterior y cuyos puertos son básicos para esa tarea. Aunque conviene advertir que no estamos en los tiempos de “La ley del silencio”. Lo que sí es cierto es que es un asunto relacionado con el sector público y había que ver dentro del mismo que está ocurriendo, merecía la pena hacer una aproximación.
Y como la tecnología permite y la transparencia obliga, salvo para algunos como veremos a continuación, he podido obtener información de ciertos organismos y empresas, del sector público estatal, para hacer una cierta radiografía sobre el asunto de las retribuciones.
Empezaré por decir que la famosa COMISIÓN NACIONAL DE LOS MERCADOS Y LA COMPETENCIA (CNMC) no ha publicado aún las cuentas anuales del ejercicio 2015 y eso que exigen mucha información a los demás. Y continuaré por afirmar que el CENTRO DE INVESTIGACIONES SOCIOLÓGICAS no informa del número medio de empleados con los que cuenta, lo que contrasta con su afán investigador. La información, la anterior y la que sigue, está obtenida en el Ministerio de Hacienda y Función Pública.
No estaría de más que el sistema de contabilidad pública obligara a que las entidades del sector público estatal debieran reflejar, para cualquier magnitud e información, la comparación con el dato correspondiente del ejercicio anterior. Lo que sí ocurre con las empresas o entes empresariales, quizá por utilizar criterios mercantiles que sí obligan.
En el cuadro que pueden ver más adelante aparecen datos de entidades o empresas de manera individual y también, en algún caso, para la totalidad del grupo empresarial de forma consolidada para que se pueda apreciar la diferencia entre analizar la cabeza del grupo correspondiente o el conjunto del mismo. Pero primero he querido mostrarles lo que me parece un ejemplo de transparencia al ofrecer información de las retribuciones por categorías profesionales. Sin que sirva de precedente, esta vez debo hablar bien de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) por la información ofrecida.

De la memoria de 2015 de la Agencia Estatal de Administración Tributaria
Y aquí podemos ver el efecto que supone tomar decisiones con los datos medios y así entenderán una vez más por qué no es mi medida preferida, aunque en algunas ocasiones, como es esta, no quede más remedio que usarla. Observen que, en la AEAT, los salarios medios del grupo más elevado tienen un valor de casi 4 veces los del grupo inferior de importancia significativa.
Cuando se analizan ciertas retribuciones públicas uno piensa en aquél que decía que la formación es cara, sin darse cuenta de que más costosa es la ignorancia. Reflexionen sobre las negativas consecuencias de un servicio público mal retribuido, todo ello sin olvidar que algunas empresas o actividades no deberían formar parte de lo público.

Fuente: Ministerio de Hacienda y Función Pública y elaboración propia
Ya ven que sorpresa, no hay grandes diferencias entre considerar los salarios medios de la cabecera de RENFE o de todo el grupo y que de los mismos no se puede decir que estén en una franja salarial reducida. Están en el decil 10 de salarios del país.
No sabemos qué hace exactamente la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, constituida en 2014, lo que sí sabemos es que sus 35 empleados tienen unos salarios dignos de la SAREB. Como les ocurre a los 37 empleados del FROB que casi se han quedado sin trabajo, qué cara nos sale la reestructuración bancaria.
No nos ocurre lo mismo con nuestro Correos o con la Biblioteca Nacional, ¿se han fijado en lo poco que cobran nuestros bibliotecarios? Ya ven, animar las carreras de caballos está mejor retribuido que investigar e incluso que gestionar el mejor sistema de trasplantes del mundo. ¿No les parece sorprendente el salario medio de la Organización Nacional de Trasplantes?
Cuando uno se fija en la SEPI, la sociedad que aglutina la mayor parte de la cartera empresarial del Estado, se observa claramente el efecto del clúster. Ya ven la diferencia salarial entre el colectivo de las 200 personas que engrosan la cabecera del mismo y las 74.000 con que cuenta en su conjunto. Y eso que tienen limitada por ley la retribución.
En el caso del Consejo Superior de Deportes en el que se ha producido un aumento del 13,66% en el salario medio, no crean que es por efecto de una buena gestión, es simplemente porque la masa salarial de 2014 se ha mantenido en 2015, pero para 253 personas en vez de para 289.
No puedo dejar de mencionar el importante salario medio que perciben los 84 empleados de ACUAMED, empresa que ha sonado en los medios de comunicación, en multitud de ocasiones en los 2 últimos años, como consecuencia de ciertas irregularidades en la gestión. Quizá sea un ejemplo más del insatisfecho clúster.
Creo que los organismos de supervisión, CNMV, CSN, CNMC, por ejemplo, se están convirtiendo en parte del clúster y es algo contra lo que habría que luchar, no porque los técnicos deban percibir unas menores remuneraciones, sino porque si los directivos no asumen la correspondiente responsabilidad, no pueden percibir salarios tan elevados. Máxime cuando en esos organismos están conviviendo personal laboral y funcionarial, sin que sepamos las razones que llevan a ello ni se expliquen convenientemente las diferencias salariales entre unos grupos y otros. Y es muy posible que esta separación esté favoreciendo el enchufismo y la asignación de puestos por razones personales y no por méritos profesionales.
PS:

De la memoria de 2014 del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas
Les he dejado para el final, porque lo advertí al final, la constatación del error cometido por el órgano que vigila a los vigilantes, el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, que demuestra, o bien falta de rigor, o que no saben usar una simple hoja de cálculo, porque 73 más 8 son 81, ¿será que los hombres del ICAC son muy hombres?